Con solo 3 añitos, Olivia Dabrowska (Kakrów, Polonia, 1989) interpretó su primer y (casi) último personaje en el cine. Un papel breve, pero a la vez uno de los más icónicos de la historia del cine. Ella fue la niña que, vestida con un abrigo rojo, daba la única nota de (trágico) color a la monocroma 'La lista de Schindler' (1993), la película más unánimemente aclamada de Steven Spielberg.
Al acabar el rodaje, el director le dio a la niña un consejo: “No veas la película hasta que seas mayor". Sin embargo, cuando cumplió los 11 años, y como le ocurría a la esposa de Barba Azul en el cuento, la curiosidad venció a la orden, y Olivia quiso verse en el cine. Como la propia actriz le ha confesado a The Times en una entrevista, ver a su personaje en un campo de exterminio nazi le traumatizó de por vida: “Fue realmente horrible. No podía comprender lo suficiente, pero estaba segura que no quería volver a ver la película en mi vida”. En la escena más dolorosa de la película, descubríamos que la niña había sido asesinada tras ver su abrigo rojo sobre un montón de cadáveres: demasiado para una pequeña de once años.
“Durante mucho tiempo me sentí avergonzada de haber hecho la película y enojada con mi madre y mi padre por haberle contado a la gente lo de mi selección para el personaje", explica Oliwia. "La gente me decía: 'Debe de ser muy importante para ti, debes de saber mucho sobre el Holocausto'. Pero yo me sentía frustrada con todo el asunto”. Sin embargo, pasado el tiempo, Dabrowska, que ahora tiene 23 años, pudo reconciliarse con su pasado e incluso volver a ver la película, esta vez a los 18 años, tal y como le recomendó Spielberg. “He formado parte de algo de lo que puedo estar orgullosa”, reconoce ahora la joven, que con 6 años se retiró del cine con un pequeño papel en la película de producción polaca 'Gry uliczne' (Krzysztof Krauze, 1996).